Hábitat colaborativo
En un hábitat colaborativo con toma de decisiones de manera sociocrática que favorece el alcance de objetivos, esa es la principal visión de nuestro proyecto.
Decisiones desde el diseño, prestaciones, horarios, actividades, servicios prestados desde la propia comunidad… estos son algunos ejemplos de como se contempla la sociocracia.
Acuerdos por consentimiento y no por consenso. No existen mayorías ni minorías.
Características generales y básicas de la comunidad.
Sostenibilidad verdadera para el hábitat. ahorro energético, generación de energía propia, ahorro de agua, materiales no contaminantes…
Una gobernanza sin mayorías ni minorías en el bien común de la comunidad.
Organización patrimonial y organización socio-cultural.
Uso de recursos energéticos propios y próximos para optimizar costes económicos y medioambientales.
La comunidad no dependerá de factores externos gracias a su ausencia de deudas.
La comunidad cuenta con servicios propios internos de hostelería, mantenimiento de instalaciones…
Un espacio en el que se ubicará el núcleo social, que se compone de distintas áreas.
Apartamentos para una o dos personas. Con una superficie que ronda los 35 metros cuadrados cada uno.
Disponibles para personas válidas o que precisen alguna ayuda parcial.
Un área disponible para dependientes temporales cercano al área de servicios.
En este área de uso común se dispondrá de comedor, cocina, lavandería, limpieza y otros servicios de la comunidad.
Lugar para la realización de actividades sociales, culturales, recreativas, sala de informática y de asistencia personal online.
Habitaciones para familiares de los residentes que estén de visita.
Novedades en el proceso de puesta en marcha del proyecto e información interesante
La soledad no deseada se ha convertido en uno de los grandes…
Hábitat colaborativo
Convivencia basada en la solidaridad, comunicación y cuidados.
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